Se declara Alerta Amarilla para las comunas de Pozo Almonte, Huara y Camiña por evento meteorológico
De acuerdo con la información proporcionada por la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), mediante su alerta meteorológica el cual pronostica la ocurrencia de precipitaciones moderadas en la cordillera de la Región de Tarapacá, entre los días 20 y 22 de febrero, concentradas en un periodo inferior a 12 horas, durante las tardes y noches del periodo señalado.
Los montos estimados de precipitación en milímetros (mm) son:
Sector |
Jueves 20 |
Viernes 21 |
Cordillera |
Entre 10 y 15 |
Entre 10 y 20 |
Por otro lado, la DMC se emitió la Alerta Meteorológica que pronostica la ocurrencia de tormentas entre el jueves 20 y el domingo 23 de febrero, en la zona cordillerana de la región. Además, se mantiene vigente el Aviso Meteorológico que indica que entre la noche del viernes 21 y la mañana del sábado 22 se esperan precipitaciones normales a moderadas en los sectores de costa y depresión intermedia de la Región de Tarapacá.
Por su parte, SERNAGEOMIN en su Minuta Técnica por peligro de Remociones en Masa, indica que la posibilidad de ocurrencia de remociones, tales como flujos de detritos (aluviones), deslizamientos y/o caídas de rocas (derrumbes), es de carácter Alta en el sector cordillerano y precordillerano de la región.
Finalmente, la Dirección de Obras Hidráulicas del Ministerio de Obras Públicas (DOH-MOP) señala que ante los pronósticos presentados por la DMC y SERNAGEOMIN, existe un riesgo activo de desborde de ríos, considerando los daños existentes en las riberas, tras los aumentos de caudal producidos en las últimas semanas en las zonas cordilleranas y precordilleranas.
En atención a estos antecedentes, la Intendencia de la Región de Tarapacá, en coordinación con la Dirección Regional de ONEMI declara Alerta Amarilla para las comunas de Pozo Almonte, Huara y Camiña, por evento meteorológico, vigente a contar de hoy y hasta que las condiciones así lo ameriten.
Con la declaración de la Alerta Amarilla, se alistarán escalonadamente los recursos necesarios para intervenir de acuerdo a la evolución del evento, con el objeto de evitar que éste crezca en extensión y severidad, minimizando los efectos negativos en las personas, sus bienes y el medio ambiente.