Cinco adultos y la misma cantidad de adolescentes fueron condenados por su participación en distintos delitos de robo de vehículos con intimidación o que estaban estacionados en la vía pública, tráfico de drogas y tenencia de arma.
La investigación llevada adelante por la Unidad de Análisis Criminal y Focos Investigativos (Sacfi) de la Fiscalía junto a la Sección de Encargo y Búsqueda de Vehículos (Sebv) de Carabineros, permitió la condena de diez miembros de una banda criminal que robaba vehículos en la región, ya sea que estuvieran estacionados en la vía pública o intimidando a sus conductores, para luego intercambiarlos por droga o dinero en la frontera con Bolivia.
“La investigación permitió acreditar que esta banda sustraía vehículos que se encontraban estacionados en la vía pública sacando las chapas de las puertas para confeccionar llaves falsas y así trasladarlos hasta el altiplano, y también efectuaron algunos robos con intimidación y/o violencia, abordando a las víctimas cuando llegaban en sus vehículos a sus domicilios, donde se les cruzaban por delante para sustraerles los móviles con la modalidad del portonazo o encerrona”, explicó el fiscal del foco, Maximiliano Mariángel.
El fiscal los acusó por seis robos ocurridos entre octubre de 2019 y mayo de 2020, además de tráfico de drogas y tenencia del arma de fuego, ya que cuando la banda fue desarticulada en marzo del año pasado, se encontró en los domicilios de los acusados 2 kilos 254 gramos de droga, un revólver con seis municiones y más de 9 millones de pesos en efectivo, “confirmando la hipótesis que se mantenía de que el robo de los vehículos está íntimamente ligado con el tráfico de drogas, ya que estos móviles se intercambiaban en la frontera por droga, ya sea marihuana, cocaína o pasta base y también por armas y dinero en efectivo”.
En distintos procedimientos realizados en el tribunal oral y en el juzgado de garantía de Iquique, los cinco acusados adultos fueron condenados a penas entre 13 y 4 años de presidio, mientras que los 5 adolescentes recibieron penas entre 3 años de régimen semicerrado y 541 días de libertad asistida especial, por los diferentes delitos en los que participaron.