El delegado y los integrantes del Consejo Regional contra el Crimen Organizado recorrieron el recinto y coordinaron la implementación del proyecto de entregas vigiladas de drogas entre Tarapacá y la región Metropolitana.
En el marco de la ejecución de las medidas del Plan Regional contra el Crimen Organizado, este jueves el delegado presidencial de Tarapacá, Daniel Quinteros, lideró una visita al aeropuerto Diego Aracena de Iquique junto al Ministerio Público, policías y entidades fiscalizadoras, para abordar los desafíos a los que se enfrenta la región ante la próxima apertura de las nuevas instalaciones del recinto y mayor flujo internacional.
El recorrido se realizó tras la visita del delegado al aeropuerto Arturo Merino Benitez de Santiago en el mes de marzo, instancia en la que conoció en terreno los sistemas de control que se implementan en la Región Metropolitana y se abordó el proyecto de “Entregas Vigiladas” entre la Fiscalía Local de Alto Hospicio y la Fiscalía de Pudahuel, el cual tiene el objetivo de crear un sistema de análisis de información conjunto.
La visita al aeropuerto de Iquique comenzó con una reunión entre los integrantes del Consejo Regional contra el Crimen Organizado y culminó con un exhaustivo recorrido por las instalaciones que están ad portas de abrir al público, entre ellas, los sectores donde se instalará la Policía de Investigaciones, Carabineros y Aduanas para el control de pasajeros y cargas. Además, pudieron verificar la reciente instalación de modernos equipos de rayos X de última generación y con inteligencia artificial.
Tras la actividad, el delegado presidencial recordó que por primera vez el Gobierno del Presidente Gabriel Boric ha dotado a Chile de una Política Nacional contra el Crimen Organizado, que busca articular los esfuerzos de las distintas instituciones, y en ese contexto detalló que “lo que estamos haciendo hoy día es prepararnos ante la pronta apertura del aeropuerto Diego Aracena, que por cierto va a mejorar sustancialmente la forma en que los tarapaqueños y tarapaqueñas viajamos, pero también vienen riesgos asociados y eso es lo que justamente estamos hoy día anticipando, buscando protocolos, estrategias y tácticas que nos permitan efectivamente vigilar las entregas en materia de drogas, articular distintos procedimientos con el aeropuerto Arturo Merino Benitez de Santiago y otros aeropuertos internacionales que también se podrían sumar como destinos y rutas (…) para poder atacar las bandas de crimen organizado que están de alguna manera pensando o intentando utilizar este aeropuerto como un punto de conexión, un punto de entrega o incluso un punto de salida de drogas, de armas o de otras sustancias ilícitas”.
El fiscal regional de Tarapacá, Raúl Arancibia, también explicó que en la reunión se abordaron los desafíos en materia de dotación de fiscalizadores y policías ante la ampliación del aeropuerto. “La visita de hoy nos ha demostrado que este aeropuerto va a quedar en un nivel de seguridad bastante alto, lo cual es muy importante porque va a tener características de aeropuerto internacional. En la medida que tengamos las dotaciones que son necesarias para cubrir tanto de Aduanas, de la Policía e Investigaciones, Carabineros y la propia Dirección General de Aeronáutica, esto va a ser una verdadera barrera”, indicó.
Por su parte, fiscal adjunto de la Fiscalía local de Alto Hospicio, Héctor Lopez, destacó que “esta actividad es la continuación de una que tuvimos en Santiago precisamente en el aeropuerto de Pudahuel, de manera tal de establecer acá en la región en el aeropuerto Diego Aracena, las mismas condiciones de trabajo que presenta la Policía de Investigaciones, la Fiscalía, el servicio Nacional de Aduanas, con tal de poder actuar de manera pronta y diligente en la detección del tráfico ilícito de estupefacientes, ya sea a través de pasajeros o con la autorización de envíos de cargas o encomiendas”.
Asimismo, el Jefe de la Brigada de Robos de la Policía de Investigaciones de Tarapacá, subprefecto Cristian Benavides, valoró que las rutas internacionales del aeropuerto aportan al desarrollo, pero advirtió que trae algunos riesgos. “Estos riesgos tienen que ver con los múltiples delitos que se pueden cometer en el trayecto de un aeropuerto, por lo tanto, la Policía de Investigaciones de Chile marca su presencia en los aeropuertos a nivel nacional cumpliendo su misión de control migratorio, tanto de las personas que ingresan como las que salen del país, y no es solamente un control migratorio que se realiza en cuanto a verificación de idoneidad de documentos, sino que también de análisis de información que nos sirve para fortalecer la seguridad nacional”.