A las penas efectivas de 15 años y un día de presidio fueron condenados dos hombres y una mujer, acusados por la Fiscalía de Alto Hospicio por su participación en el homicidio de un ciudadano colombiano en febrero del año pasado, a quien dieron muerte de un disparo en la cabeza al interior de su domicilio ubicado en la toma Naciones Unidas, del sector El Boro.
En el juicio oral, la fiscal jefe de Alto Hospicio, Virginia Aravena, presentó prueba que permitió dar por en acreditado que el día de los hechos, cerca de las 23:00 horas, mientras la víctima Jhan Carlos Hurtado Micolta estaba junto a su pareja durmiendo al interior de su casa ubicada en Avenida Indura, Tomas Naciones Unidas, sector El Boro; llegaron al lugar seis sujetos, entre los que se encontraban los acusados Julián Guampe Bravo (de nacionalidad colombiana), Francisco Morales Valenzuela y Lily Echeverría Valenzuela (chilenos), a bordo de un vehículo Mazda Demio, de propiedad de la madre de los dos últimos.
Morales Valenzuela y Guampe Bravo junto a otros tres sujetos se aproximaron al inmueble armados, mientras Lily Echeverría se quedó afuera realizando labores de vigilancia, y al momento que la víctima les abrió la puerta, le dispararon impactando en uno de sus hombros, por lo que ésta huyó hasta la habitación donde estaba su pareja, a quien uno de los individuos obligó a agacharse y taparse la vista, mientras el resto del grupo registraba la casa y efectuaban disparos, preguntando por el dinero e intentando sustraer un televisor de grandes dimensiones, sin lograrlo. Luego trasladaron a la víctima hasta el living, donde le reclamaron por un vehículo que tenía en custodia y había dejado abandonado en el desierto, disparándole en el cráneo y causándole la muerte. Todos los sujetos huyeron a bordo del mismo móvil.
La Fiscalía presentó en el juicio los testimonios de un testigo reservado y de los funcionarios de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones que estuvieron a cargo de las diligencias, en especial los análisis de las cámaras de seguridad; los peritajes realizados en el sitio del suceso por al Laboratorio de Criminalística, y la autopsia del Servicio Médico Legal que confirmó la causa de muerte.
Terminado el juicio, el tribunal resolvió condenar por unanimidad a los acusados como autores del delito de homicidio con la calificante de alevosía, entendiendo que crearon y se aprovecharon de las condiciones ventajosas de indefensión de la víctima.