Veinte de los llamados rucos que por años estaban instalados en los faldeos del Cerro Esmeralda –frente a la garita de Carabineros, en la subida a Alto Hospicio-, generando microbasurales fueron desarmados hoy (domingo) en un operativo conjunto entre la Gobernación Provincia de Iquique, Carabineros de Chile y la Municipalidad de Iquique.
Para el gobernador Álvaro Jofré, quien lideró el operativo, el objetivo fue de una vez por todas sacar a quienes se «tomaron» parte del cerro «dando una imagen bastante poco agradable para quienes nos visitan y para nosotros, los iquiqueños”.
Jofré precisó que en una reunión del Comité Provincial de Seguridad Pública surgió este tema “y todos concordamos en que era necesario sacar a los llamados ruqueros, muchos de ellos con prontuario policial, a quienes les ofrecimos como alternativa la hospedería del Hogar de Cristo, de Alto Hospicio, pero nadie aceptó irse, ya que debían ingresar a un programa de alcohol y drogas».
En su defensa, los ruqueros alegaron que el dueño del terreno (“un pakistaní”, protestaban) les había dado permiso para que levantarán precarias “viviendas” de cartón, madera, cholguán, en medio de microbasurales. Sin embargo, ningún documento respaldaba sus argumentos y los “rucos” fueron desarmados, porque estaban en terreno fiscal.
El gobernador Álvaro Jofré informó que seguirán estos operativos de limpieza del cerro “uno de nuestros patrimonios que debemos cuidar, así como cuidamos y nos preocupamos del borde costero, hoy también queremos cuidar nuestro cerro Esmeralda”.