Al terminar la primera semana de juicio oral, declararon el oficial Mauricio Cadenas, que el año 2015 era comisario en la comuna, y el ex jefe de la Brigada de Homicidios Iquique de la Policía de Investigaciones, René Retamal.
Durante casi toda esta mañana declaró en el juicio oral por la desaparición de José Vergara, el mayor Mauricio Cadenas, quien en septiembre de 2015 era el comisario de Alto Hospicio y fue uno de los primeros oficiales de Carabineros en recibir a los familiares del joven, cuando buscaban una respuesta sobre su paradero.
En el interrogatorio de la fiscal jefe de Alto Hospicio, Virginia Aravena, y los abogados querellantes; el oficial explicó que apenas llegó la familia de Vergara a la comisaría, revisó el audio de Cenco y la hoja de ruta del furgón policial utilizado por los acusados el día de los hechos, confirmando que en ambos registros se señalaba que no habían detenido a José Vergara, ya que no estaba en el domicilio. Además, habló con los acusados Carvajal y Muñoz, quienes mantuvieron la misma versión.
“Yo les creí y me convencí que ellos no habían detenido al joven. En todos mis años de servicio, nunca había visto que alguien fuera capaz de dejar registro de una mentira así y por eso les aseguré a los familiares que los carabineros no habían participado”, afirmó el oficial.
Agregó que en esa misma ocasión, las hermanas de José le contaron que en el sector de Huantajaya conversaron con un señor que trabajaba en el lugar, quien les señaló haber visto a una persona de similares características al joven caminado por los cerros. “Le encargué a la SIP que investigara esa información, y al día siguiente, los funcionarios me informaron que se había descartado que correspondiera el desaparecido, en un 70%, ya que no habían datos concretos y se trataba de una confusión”, explicó Mauricio Cadenas.
La Fiscalía también presentó a René Retamal, quien en esa fecha era jefe de la Brigada de Homicidios Iquique de la Policía de Investigaciones, y estuvo a cargo de la investigación y búsqueda de José Vergara, la cual se extendió por varios meses y abarcó un radio de unos 400 kilómetros en torno al lugar donde los acusados dijeron haberlo abandonado.
Retamal indicó que como el caso fue ampliamente conocido y se divulgaron fotos del desaparecido por las redes sociales, en televisión y en todos los servicios públicos y fronterizos, recibieron múltiples llamados de personas que decían haber visto a José Vergara en distintas lugares, pero que todos esos datos fueron chequeados, descartando que las personas divisadas correspondieran a José Vergara.