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Gracias a la prueba presentada por la Fiscalía, el tribunal oral en lo penal de Iquique condenó a los dos ciudadanos chilenos Francisco Apablaza Henríquez y Bastián Dávila Baldomino, quienes fueron detenidos en julio del año pasado portando un arma de fuego y drogas en el marco de una diligencia de la Policía de Investigaciones.
Con la prueba presentada en el juicio oral por la fiscal (s) Marta Vallejo, se dio por acreditado que el día 4 de julio de 2023 y debido a diligencias efectuadas por la Policía de Investigaciones para concretar una orden de detención en contra de Bastián Dávila por una investigación diversa, cerca de las 22:00 horas lo sorprendieron saliendo de un inmueble en el sector sur de Iquique junto al imputado Francisco Apablaza, quienes se subieron a un vehículo y se movilizaron por diversas calles de la ciudad, siendo alcanzados y fiscalizados en la intersección de calles Santiago Polanco con Los Llameros. En ese contexto, los policías verificaron que el imputado Dávila Baldovino mantenía debajo del asiento de conductor una pistola marca Colt calibre 45 , con un cargador con 6 cartuchos compatibles con el arma y aptos para el proceso de disparo.
Posteriormente los funcionarios policiales ingresaron, autorizados judicialmente, al inmueble en el cual habían visto salir los imputados, descubriendo que el imputado Francisco Apablaza mantenía la cantidad de 32 cartuchos calibre 9×19 mm, tres bolsas plásticas contenedoras de cocaína con un peso de 253 gramos y 23 bolsas plásticas de diversos tamaños contenedoras de marihuana con un peso de 313 gramos.
La fiscal presentó en el juicio los testimonios de los funcionarios de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones que realizaron la primera diligencia que dio con los imputados, la cual se enmarcaba en otra investigación por un caso de homicidio. Además, se presentaron los peritajes de la PDI que confirmaron que el arma estaba para el disparo y los informes de los profesionales del Servicio de Salud de Iquique que acreditaron que las sustancias incautadas correspondían a cocaína y marihuana.
Finalmente, el tribunal resolvió condenar a Francisco Apablaza a la pena de cinco años y un día de presidio como autor de un delito de tráfico ilícito de estupefacientes y a una pena de 541 días de presidio como autor de un delito de tenencia ilegal de municiones. Mientras que a Bastián Dávila se le condenó a una pena de tres años y un día de presidio como autor de un delito de tenencia ilegal de arma de fuego.
